La alimentación, la edad y la piel

Son distintas las causas del envejecimiento de la piel pero se ha descubierto que el sistema hormonal incide directamente en nuestra salud y belleza. La apariencia y textura de la piel está directamente relacionada con el nivel de hormonas que segrega el organismo. De este modo, a medida que los estrógenos disminuyen, se acelera el proceso de envejecimiento e incide en la hidratación, el grosor y la pigmentación de la piel, así como en la cantidad de grasa que posee. Los estrógenos favorecen la renovación de las células y estimulan la síntesis de colágeno y elastina.

Existen otras hormonas que también influyen en la piel como las hormonas tiroideas, cuya disminución provoca un engrosamiento de la piel y cuando se segrega en exceso produce una epidermis más delgada y frágil.

A los 20 años, las hormonas estimulan el funcionamiento de las glándulas sebáceas y se inician los problemas de exceso de grasa en el rostro, surgen las impurezas, los brillos y el acné.

Con el tiempo, se produce el envejecimiento cutáneo ya que disminuye el nivel de hormonas y el ritmo de renovación celular es más lento.  La piel pierde firmeza, grosor y elasticidad. A los 50 años, la bajada de estrógenos de traduce en una piel seca y flácida que se refleja tanto en el rostro como en el cuerpo.

Mantener una piel tersa y radiante no sólo se logra con el uso de cremas y tratamientos faciales; la alimentación también es esencial para mantenerla saludable y retardar los efectos del envejecimiento.

 Especialistas explican que lograr una apariencia más jovial depende en gran medida de llevar un estilo de vida saludable.

Dos de los aspectos más importantes de la alimentación para mantener una piel bella son: controlar la inflamación, la cual puede acelerar el envejecimiento en todo tu cuerpo, y consumir una dieta rica en fito-nutrientes (con base en plantas) y antioxidantes, que puede ayudar en la lucha diaria contra otros factores ambientales a los que se enfrenta tu piel.

 Otro aspecto importante es limitar el consumo de azúcar, porque daña el colágeno lo que puede generar arrugas. Tu dieta debe incluir regularmente una gran cantidad de frutas y vegetales coloridos, especialmente las verduras de hojas verdes oscuras, frutas y vegetales de color naranja y grasas saludables.

El doctor Nicholas Perricone, dermatólogo y nutriólogo certificado, experto en antienvejecimiento y autor del best seller Forever Young, recomienda ampliamente incluir estas tres cosas en tu dieta de manera regular, si deseas mejorar tu piel.

 A continuación, te presentamos alimentos que no deben faltar en tu dieta:

 Aguacate: Posee propiedades hidratantes para la piel por su gran contenido de aceite. Estimula la formación de colágeno y retrasa el proceso de envejecimiento por su contenido de vitamina E; y ayuda con problemas de la piel como eczema, dermatitis y granos.

Salmón: Los ácidos grasos poliinsaturados Omega 3 le aportan a este pescado sus propiedades antioxidantes tan beneficiosas para la piel, así como su papel protector, regenerador e hidratante.

Té verde: Además de ser bueno para tu corazón, contiene un potente polifenol, el EGCG (epigalocatequin galato), el cual ayuda a impulsar la desintoxicación, protege a la piel de los rayos ultravioleta y, de acuerdo con algunos estudios en laboratorio, podría reactivar las células muertas de la piel. Toma varias tazas al día para obtener mejores resultados.

Berro. Es un diurético natural y contiene fito-nutrientes. Diversas investigaciones indican que también sirve para proteger del cáncer. Agrega un poco en tu ensalada favorita por lo menos dos días a la semana para lograr una piel clara y radiante.

Bayas. Estas frutas de colores profundos no sólo son buenas para tu cerebro y tu corazón, sino también contienen altos niveles de antocianinas, las cuales son potentes fito-nutrientes que protegen tu piel del envejecimiento prematuro a nivel celular y molecular (ADN). Entre ellas, se encuentran las zarzamoras, mora azul y grosellas.

Zanahorias. Tienen un alto contenido de beta-caroteno. Estudios demuestran que las personas que ingieren una zanahoria mediana al día, pueden reducir significativamente el envejecimiento y prevenir otras enfermedades. Pueden comerse cocidas o crudas, combinadas con otros platos o tomarse en jugo.

Las nueces: son ricas en fibra haciéndolas efectivas al combatir los signos de envejecimiento. Las mejores son las crudas porque las saladas y tostadas, pueden ser negativas si se consumen en grandes cantidades.

Las personas necesitan energía para sus actividades diarias. El cuerpo quema carbohidratos para poder hacerlo y la mejor fuente son pastas y arroz moreno.

La última cosa necesaria para desintoxicar y mantener la piel suave todo el día es el agua. La mayoría ha escuchado que es necesario tomar al menos 8 vasos de agua al día. Estudios demuestran que el cuerpo requiere más que eso y es mejor que cualquier crema del mercado.

Otros aspectos importantes que debes cuidar son: usar un protector solar, evitar fumar y controlar el estrés para mantener tu rostro y todo tu cuerpo en perfectas condiciones.